Lo que dice Lord Camote…
Que origen es destino, si no que le consulten a la diputada de Morena, Nay Salvatori que estará de regreso a la radio en Puebla, la plataforma en la que construyó su nombre como la “reina de la radio”, mucho tiempo antes de que se transformara en la Señora de las Lomas, el personaje con el que ha acumulado la popularidad en redes sociales.
Será a través de la 96 en Cadena In todos los jueves en la tarde en donde transmitirá la nueva temporada de lo que en la primera década de este siglo llevó como nombre Ta Carbón, un reallity que se colocó en la preferencia de la audiencia hasta alcanzar tal popularidad que en 2018 fue invitada a ser candidata a diputada federal y luego fue legisladora.
Polémica de principio a fin, la emisión de Salvatori seguirá por el camino con el que arrancó su carrera en los medios: la disrupción.
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Pues ya hace un día que la escritora, investigadora y académica de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, Beatriz Gutiérrez Müller publicó en su cuenta de Facebook la felicitación a la presidenta Claudia Sheinbaum con motivo de su cumpleaños en la que le desea salud con motivo de su cumpleaños y que “la inteligencia, que no le sobra, siga siendo su guía” y el equívoco sigue ahí.
Ya hasta en la mañanera del pueblo, como bautizó su conferencia de prensa de todas las mañanas en Palacio Nacional, Sheinbaum dijo querer mucho a la escritora y esposa del ex presidente Andrés Manuel López Obrador y la polémica redacción sigue ahí, con un monumental descuido o traición del subconsciente.
¡Vaya cariño el que se tienen!
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La decisión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación por negar un amparo a uno de los productores estrella de la televisión mexicana como Luis de Llano que intentaba evadir su responsabilidad como depredador sexual de la actriz Sasha Sokol cuando tenía 14 años está muy lejos de ser un caso del ámbito del espectáculo, o aislado, porque las víctimas de abuso sexual en el país se cuentan por miles y según el criterio jurídico habían prescrito al pasar de los años.
Uno de los casos más escandalosos en Puebla fue el del sacerdote Nicolás Aguilar que llegó a acumular en Tehuacán y en Los Ángeles cientos de acusaciones por su condición de depredador sexual, sin embargo, fue protegido por la jerarquía católica y una clase política mocha pero criminal en el inicio del año 2000.
Ya cuando se le quiso juzgar, los delitos habían prescrito.
De ese tamaño era el nivel del cinismo aquí cerquita.
@LordCamote_
