Los “baby boomers” que desplazaron a la “Generación Z”

Los “baby boomers” que desplazaron a la “Generación Z”
Fernando Maldonado
Parabólica

Parabolica.MX escribe Fernando Maldonado 

El sábado 15 a las 13:20 uno de los integrantes de la marcha convocada como parte de la Generación Zeta ingresó al bar Barra Mestiza que opera en la esquina de la 16 de Septiembre y 3 Poniente, justo en la contra esquina de la Catedral Metropolitana. Se sentó en la barra, pidió una cerveza de barril clara y se puso a degustarla.

La imagen del comensal no correspondía a la de alguien que hubiese nacido entre 1997 y 2012, sino a la de quien nació en la década de los 50 y 60: los Babby Boomers. Vestía cómodos zapatos top sider para pescar, pantalón de algodón color caqui, una camisa impecablemente planchada de color blanco con vivos azules y un sombrero Panamá, faltaba menos.

Había que llevar el símbolo del movimiento del edil de Uruapan, Carlos Manzo masacrado el 1 de noviembre en Michoacán. Esa fue la coartada que permitió a los agitadores de una marcha sabatina que careció de jóvenes en su mayoría, para dejar salir al segmento social que antes, en la década de los ’30 ya había protagonizado sangrientos episodios de la historia en México: el Movimiento Cristero.

En mala hora dos trabajadores del área de Normatividad del ayuntamiento de Puebla debidamente acreditados y con uniforma arribaron al establecimiento para hacer una revisión documental del negocio. El adulto mayor que bebía su cerveza después de la manifestación y la marcha extrajo su teléfono móvil, comenzó a acosar a los funcionarios y a gritar consignas.

Aún no se conocía de las violentas escenas que un contingente protagonizó a las afueras de Casa Aguayo en la que un presunto trabajador del ayuntamiento de San Andrés agredió a un adulto mayor, pero de pronto todo cobró sentido a la luz de la existencia de un documento que el gobernador Alejandro Armenta citó en su conferencia de prensa de lunes: El Ave Azul, diseñado desde la década de los ‘90.

Manual de operación política y electoral diseñado desde las entrañas del conservadurismo para influir en procesos electorales bajo una variante de títulos con un solo propósito: reclutar jefes de manzana, líderes de colonia y comunidades afines al Partido Acción Nacional, como el parroquiano que plácidamente bebía cerveza en el céntrico bar de la capital poblana.

De la teoría a la acción planteada en ese documento del que persistentemente se ha negado su existencia cobra mayor protagonismo con lo sucedido antes y durante la manifestación organizada por quienes tomaron como modelo un movimiento de las juventudes en Nepal para oponerse al uso de la tecnología y las redes sociales para la libre manifestación.

El uso de internet como herramienta principal para divulgar información falsa, o manipulada, promover campañas de desprestigio; la conformación de brigadas de presión e intimidación y reventar procesos electorales, es el contenido de un manual de operación que por su contenido y el momento por el que se vive en el país, encaja como traje a la medida.

La guerra sucia tiene un claro origen y sus autores han estado a la vista, el resultado también es bastante evidente, aunque como en las familias en las que domina el conservadurismo, se prefiera el silencio y se opte por esconder la basura debajo de la alfombra.

 

@FerMaldonadoMX