Parabolica.MX escribe Fernando Maldonado
El enclave opositor al grupo político del gobernador Alejandro Armenta fue y será la región de Tecamachalco. Así lo confirmó el senador y pariente del mandatario Ignacio Mier Velazco este sábado en que rindió un informe de actividades en la Cámara Alta.
Con una base de seguidores notablemente disminuida, el cacique de aquella región también hizo evidente un conjunto de elementos. El más obvio, que no ha cejado en sus intentos por convertirse en candidato a gobernador en 2030 tras la derrota escandalosa de 2023.
Pero también que sus aspiraciones no se nutren de las mayorías, sino de las cúpulas. Destaca Adán Augusto López Hernández, el aún coordinador senatorial del que ahora sabemos, es un multimillonario que se sume como “parte fundamental de un movimiento”, -así se definió en su más reciente rueda de prensa-.
Hace meses que Adán no es recibido en Palacio Nacional y por si hubiese dudas, no existe una sola imagen que refleje cercanía o accidentada coincidencia con la presidenta Claudia Sheinbaum en los actos conmemorativos de la Independencia de México.
No ha aparecido medianamente cerca. Ni en la apertura de sesiones del periodo legislativo en curso o en las respectivas entregas del paquete económico como la Ley de Ingresos en el Senado de la República. La frialdad política que es proporcional a la lejanía con el tabasqueño, no admite réplica ni interrogante alguna.
El escándalo persigue a Adán, dentro y fuera del Senado de la República. No solo se ha mantenido en el foco público por la orden de aprehensión y posterior captura en Paraguay de su exsecretario de Seguridad en Tabasco, Hernán Bermúdez Requena, sino también por otras fichas que promueve para contender en 2027.
Por eso y por otras causas el apoyo del tabasqueño parece el más anticlimático de quienes estuvieron presentes en aquel lugar, trinchera de Mier.
También están dos figuras que acarician la idea de mayores responsabilidades políticas como Francisco Ramos Montaño, funcionario en Gobernación estatal y el diputado federal por el Verde, el junior Antonio Gali López.
Pasado y presente definen otras figuras que llegaron a Tecamachalco para aparecer en la fotografía con el senador. Francisco Ramos Montaño es funcionario en la Secretaría de Gobernación, brincó del PRI a Morena de la mano de Fernando Manzanilla, el ex coordinador de la campaña interna de Mier Velazco y a él reporta.
El caso de Gali López también es notable: se convirtió en candidato a diputado federal por el Verde por gestiones de Manuel Velasco, que mantiene cercanía política con el padre del diputado federal y ex gobernador, Tony Gali Fayad.
Sin la influencia y amistad de Velasco con Armenta, “junior” no tenía posibilidad de encargo alguno y ahora hace todo por convertirse en candidato a la presidencia municipal de la capital de Puebla en 2027.
En el enclave del pariente también se vieron otras figuras menores, pero notorias. El primo de Mario Delgado Carrillo, secretario de Educación, Miguel Carillo, diputado federal por Atlixco y el ¿aún priista?, Enrique Doger Guerrero, excandidato a gobernador en Puebla en 2019 además de un largo etcétera de personajes menores que ha medrado a la sombra del caudillo Andrés Manuel López Obrador. Es lo que hay.
@FerMaldonadoMX