El abogado de Ovidio

El abogado de Ovidio
Humberto Aguilar Coronado
Palabra de Tigre

Palabra de Tigre escribe Humberto Aguilar Coronado 

AMLO en 2023 dijo que ojalá, García Luna se convirtiera en testigo protegido por el bien del país para que dijera lo que sabía y lo que informaba a los expresidentes Fox y Calderón.

Ahora la presidenta Claudia Sheinbaum critica que Ovidio Guzmán haya llegado a un acuerdo de culpabilidad con la justicia norteamericana para declararse culpable, solo de algunos delitos y entrar así, a purgar su pena que no será cadena perpetua, en una de las cárceles de los Estados Unidos.

Mientras tanto, el abogado defensor de Ovidio afirmó que al gobierno de México no lo incluyeron en las negociaciones de culpabilidad porque es corrupto y no le tienen confianza.

A la defensa del gobierno salieron, desde la fiscalía general de la República con un comunicado, hasta el gobernador de Sonora con una declaración “queda bien”, pasando por las declaraciones de la presidenta, afirmando que eran irrespetuosas las afirmaciones del abogado defensor.

Desafortunadamente lo hizo en un escenario poco favorable para ella, junto a uno de los gobernadores señalados de estar en una lista del gobierno americano de tener nexos con el narcotráfico.

Visitar en un fin de semana muy complicado para la presidenta a dos gobernadores de morena altamente cuestionados, no parece haber sido la mejor recomendación de su equipo de comunicación para hacerle frente a la crisis.

En respuesta, las expresiones verbales y escritas en una de sus redes sociales, el abogado Jeffrey Lichtman, conocido como el “abogado genio”, se lanzó fuertemente afirmando que el gobierno de México es un gobierno corrupto que funge más en el papel de relaciones públicas del narcotráfico que en su función de gobernar honestamente.

Hace bien la presidenta en decir que su gobierno no establece relaciones de contubernio con nadie, pero no le ayuda visitar el estado de Sinaloa y retratarse con personajes cuestionados y con una reputación bastante dañada.

Hace bien la presidenta en afirmar que no entablará diálogo con el abogado de un narcotraficante, pero me parece un error haberse enganchado desde el principio en la polémica, para después anunciar la interposición de una demanda por difamación en nuestro país, al propio abogado.

La opinión generalizada es que Ovidio Guzmán “ya cantó”, es decir, que ya proporcionó toda la información que le requirieron las autoridades para alcanzar el acuerdo de culpabilidad y que el gobierno norteamericano solamente está administrando la información para asestar golpes mediáticos que afecten a la clase gobernante.

Porque mientras esto sucede, el presidente Donald Trump anuncia la imposición de aranceles, con el señalamiento de que el gobierno de México no ha hecho lo suficiente para acabar con el fentanilo y las bandas que lo producen y distribuyen.

 

*Es politólogo