El virus de la política infectó a José Antonio García

El virus de la política infectó a José Antonio García
Fernando Maldonado
Parabólica

Parabolica.mx escribe Fernando Maldonado

No fue del agrado general la renuncia de José Antonio Martínez a la Secretaría de Salud, confirmada por el gobernador Sergio Salomón Céspedes Peregrina el jueves 27.

El galeno cosechó aprecio legítimo cuando se distinguió como un servidor todo terreno, casi omnipresente: no faltó a las conferencias de prensa en las mañaneras, estuvo en las jornadas de salud de cada martes ciudadano y en las jornadas de vacunación masiva también se le vio aplicando biológicos contra coronavirus, al lado del equipo del sector Salud que se jugaban la vida en el sombrío periodo de la crisis de salud.

En torno de su figura existen historias como directivo de algún hospital público en las que sin luces, micrófonos ni lucimiento fatuo ayudó a quien lo requirió en momentos de apremio como los que enfrenta la gente desposeída, carente hasta de un par de oídos atentos y solidaridad humana.

Al doctor Alfredo Torres, especialista en investigación en el desarrollo de vacunas en Galveston, en Estados Unidos y con raíces en Tepeaca no le agradó la noticia de la renuncia y así lo escribió en su cuenta de Twitter, lejos del interés político y la aldea en la que suelen devorarse unos a otros.

El científico fue un referente dé información precisa en los peores momentos de la pandemia de Covid 19 y un crítico puntual de los desaciertos del subsecretario de Promoción de la Salud, Hugo López Gatell.

Lo que no podía saber Alfredo Torres en su condición de especialista en biología molecular en la universidad texana es que al doctor Martínez García lo inoculó otro virus para el que difícilmente hay antídoto o cura que se produzca en matraz o probeta: la política.

El partido Morena comenzará esta semana con un nuevo aspirante a la candidatura al gobierno de Puebla con la renuncia de José Antonio Martínez García a la Secretaría de Salud.

Sólo el sentido del olfato del galeno le habrá dado la señal para dejar la responsabilidad que asumió tras de salida del gobierno de Miguel Barbosa, de Jorge Humberto Uribe Téllez en 2020.

Alguien le habrá dado la señal para buscar aparecer en la encuesta que deberá realizar el partido en el poder apenas haya resuelto el entuerto de la elección interna presidencial, en la que compiten las corcholatas.

Martínez García va cuesta arriba porque al menos dos de los competidores -Alejandro Armenta e Ignacio Mier- tienen andado un largo camino; el tercero, Julio Huerta está en la misma lógica, pero su travesía se ve aún dificultosa, por lo menos en conocimiento y exposición mediática.

Falta aún dilucidar si el ex secretario de Salud va a esta nueva etapa de su vida pública con vida propia o fue empujado por el grupo político del fallecido Miguel Barbosa, o si como aseguran sus cercanos fue motivado por factores nacionales.

Y para nadie debe pasar inadvertido un elemento que cambiará la historia con final inesperado: el cambio de género en Puebla, Morelos, Chiapas y Veracruz con un final inesperado que beneficiaría a la más cercana a Claudia Sheinbaum, Olivia Salomón.

@FerMaldonadoMX

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