Nadie se hace responsable
Ya es de lo más común venir de la Ciudad de México en dirección a la capital poblana y encontrarse con una gigantesca hilera de tráfico que llega hasta el municipio de Xoxtla.
Se trata del atasco en la autopista que cruza el norte de la zona metropolitana y conecta la capital del país con el sureste mexicano, hacia Orizaba o Tehuacán, y de ahí a Veracruz y Oaxaca.
El atasco es tal que las largas filas de autos se extienden desde la caseta de Amozoc, con un punto de atasco en la zona de los estadios y la bajada del segundo piso.
Mientras a diario hay tránsito detenido, y en días y horas pico se vuelve un caos total, no hay una sola autoridad que se tome el tema en serio y empiece a buscarle alguna solución.
Jesús Olmos
@Olmosarcos_