Parabólica.MX escribe Fernando Maldonado
La cacería que autoridades estatales y federales desataron en contra del grupo delictivo bajo el mando del exmando de Seguridad Pública en Tabasco, Hernán Bermúdez Requena (Comandante H) en Puebla ya ofreció sus primeros resultados. No solo con la detención de “El Caiser” o el “Angelito”, sino también con la de Carlos Tomás Díaz “Licenciado Tomasín” o “El 12”.
Dos de los mandos en la estructura criminal La Barredora que floreció en el mandato de Adán Augusto López Hernández, en aquel estado y aún coordinador del grupo parlamentario del Movimiento de Regeneración Nacional en el Senado de República, han sido detectados y aprehendidos en territorio poblano, en diferentes lugares y momentos.
Así que cuando el secretario de Gobierno en Tabasco, José Ramiro López Obrador dijo el 13 de julio que con la revelación de la orden de aprehensión en contra del exsecretario de Seguridad con López Hernández “ya está saliendo toda la pudrición” no se trataba de una metáfora y tampoco de ningún sentido figurado.
Cuando el “Licenciado Tomasín” había sido capturado en una exhacienda en San Juan Tuxco, en San Martín Texmelucan en la tercera semana de enero de este año ya había una larga lista de ejecuciones en Jalpa de Méndez y Cunduacán en Tabasco, en donde ya se vivía una cruenta rivalidad entre La Barredora, bajo el mando del hombre fuerte en materia de seguridad del senador de la República y el Cártel Jalisco Nueva Generación.
La pudrición a la que se refería el funcionario en el gobierno de Javier May, hermano del expresidente Andrés Manuel López Obrador no solo era visible, sino que hedía hasta alcanzar a diversas corporaciones de seguridad en el estado del sureste de la República y, de la que extramente, López Hernández ha dicho desconocer.
Hace casi un año, antes de que se conociera la orden de búsqueda en contra de Hernán Bermúdez Requena, prófugo de la ley, una cartulina sobre la cual apareció la cabeza humana de un integrante de La Barredora daba cuenta de esa batalla criminal en el estado de Tabasco: “Carlos Tomás Díaz ahí está tu elemento y la perra de Noemí matan inocentes. Dices que tienes el apoyo de altos mandos en el gobierno…”, era el mensaje.
Noemí, la mujer mencionada en ese mensaje, formaba parte de la estructura criminal de “El Tomasín”, detenido a principios de año en el estado de Puebla, como sucedió en la últimas horas con “El Caiser” o “El angelito”, dos mandos en La Barredora que sirvieron bajo las órdenes de Hernán Bermúdez Requena, el corrupto policía que colocó en el ángulo de tiro a uno de los hombres mas poderosos en el sexenio de López Obrador, hasta acariciar la posibilidad de aspirar a ser Presidente de México.
“El Tomasín” y “El Caiser” fueron considerados por la Marina Armada de México y la Fiscalía General de la República como dos de los responsables de la generación de violencia del edén del sureste y según el comunicado de la Fiscalía General del Estado, en el caso del segundo, está relacionado al menos con diez ejecuciones, cobro de piso y otras actividades delictivas.
La detención de ambos líderes criminales en territorio poblano ocurre en el contexto de la presión en contra de La Barredora de Bermúdez Requena. El 23 de julio en Jalisco fue detenido Ulises Pinto Madera a quien se le apoda “El Mamado”, también lugarteniente del grupo criminal tabasqueño. La pudrición ya está a flote.
@FerMaldonadoMX