Piso 17 escribe Álvaro Ramírez Velasco
En las últimas semanas, ha dado la impresión de que la candidata del PRI, PAN y PRD a la Presidencia de la República se quedó sola, sin el interés serio de ninguno de los presidentes de esos partidos y, menos todavía, de los candidatos potentes en entidades y a otras posiciones.
La campaña de Bertha Xóchitl Gálvez Ruiz tiene un franco aroma a fracaso y humedad, pero el reconocimiento tácito de que ha tirado con antelación la toalla, vino en el segundo debate entre las candidatas y el candidato, el pasado domingo 28 de abril.
En su desordenada alocución y en su desbocamiento incontinente por buscar atacar a la puntera Claudia Sheinbaum Pardo, en el ejercicio que organizó el Instituto Nacional Electoral (INE), la hidalguense cometió el error de reconocer entre líneas su derrota que, aunque se ha convertido en una certeza absoluta para la opinión pública, para nada es visto como una conducta coherente, incluso en quien sabe que camina al fracaso.
Entre tropiezo y tropiezo, Bertha Xóchitl dijo que Santiago Taboada Cortina, candidato de la alianza prianista a la jefatura de Gobierno de la Ciudad de México ganará su contienda.
Él sí, pareció leerse adicional a su afirmación.
Nada extraño tiene que una correligionaria apoye al compañero; que los iguales se identifiquen y se respalden.
Lo grave es que la candidata presidencial, que debiera ser motor que jale a los demás, se quede apenas como porrista y deje de lado su propia promoción, en el foro más importante, como lo es el debate, para convertirse en brigadista virtual de quien va a una posición menor.
Pero el tema también delata claridad respecto de lo que Bertha Xóchitl piensa sobre sí misma y respecto de su campaña.
Ante la evidencia de que está, en promedio, 30 puntos debajo de la candidata morenista, la senadora de la botarga ha optado por aplaudirle a sus compañeros que, según ve ella, algo de posibilidades tendrá.
Algo parecido ocurrió en Puebla, cuando la presidenta del Comité Directivo Estatal (CDE) del Partido Acción Nacional (PAN) dio por sentada la inminente derrota de su candidato, en alianza con el PRI, PRD y el local, PSI, Eduardo Rivera Pérez.
En su afán de solidarizarse con él y, a la vez, descalificar a Morena, por el presunto allanamiento en el fraccionamiento en el que vive el ex alcalde, Augusta Valentina Díaz de Rivera Hernández, terminó por admitir en un texto, que luego debió borrar, que ya están derrotados.
"Mi solidaridad contigo Eduardo Rivera, ante estos hechos que no solo vulneran tu persona, sino que alteran la tranquilidad de tu familia, un abrazo.
"Exigimos a las autoridades federales y estatales que garanticen la seguridad de todas y todos los candidatos.
"Que nos ganen a la buena".
Hasta aquí la cita al texto que publicó en X (antes Twitter) Augusta Valentina.
Y hasta aquí, desde su visión, según deja ver, la esperanza para el PRIANPRD.
@Alvaro_Rmz_V
