Palos de ciego

Palos de ciego
Gerardo Ruiz
Historias de un joven reportero

Historias de un joven reportero por Gerardo Ruiz / @GerardoRuizInc

Una de las máximas de los consultores políticos más experimentados y con victorias presidenciales es que “las campañas electorales no se ganan, se pierden”.

En los nueve estados en los que también se viven luchas paralelas a la disputa por la presidencia de la República existen dos casos significativos en los que esta hipótesis se convirtió en teoría: Ciudad de México y Veracruz.

Las estrepitosas y pronunciadas caídas de Rocío Nahle y de Clara Brugada han encendido las alertas en el círculo más compacto del lopezobradorismo, pues entregarle a la oposición estos dos estados no solo es un gran fracaso para Morena, también es un golpe brutal para el llamado Segundo Piso de la Cuarta Transformación, que abandera Claudia Sheinbaum, pues este par de entidades cuentan con los padrones electorales más grandes del país.

Los ejemplos de Nahle y Brugada encajan perfecto con la premisa de que “las campañas no se ganan, se pierden”. Las candidaturas impuestas con calzador de la exsecretaria de Energía y de la exalcaldesa de Iztapalapa representan todos los errores que no se deben hacer durante una campaña ni la soberbia que –en muchas ocasiones– ciega a los y las candidatas.

En Puebla existen casos de campañas que iniciaron bien, pero que con el paso de los días entraron en una espiral descendentes que terminaron en la derrota de los candidatos que partieron como puntero.

En el 2008, el panista Antonio Sánchez Díaz de Rivera partió con una ventaja de más de 20 puntos sobre la priista Blanca Alcalá en la elección de ese año por la presidencia municipal de Puebla. El pésimo candidato que resultó ser Toño Sánchez sumado a su misógino dicho de llamarle “yegua” a Alcalá Ruiz precipitó aún más la caída del abanderado de Acción Nacional, quien al final fue superado por su rival del tricolor por dos dígitos.

En las elecciones intermedias del 2013, Enrique Agüera dejó la rectoría de la BUAP con la intensión de arrebatarle al PAN el Ayuntamiento de la Angelópolis frente al morenovallista Tony Gali. Los escándalos de corrupción, más la lujosa vida de sus hijas y su errática campaña llevaron al priista a caer a la mitad de la misma sin posibilidades de alcanzar al que a la postre llegaría hasta al gobierno del estado por 20 meses.

En los comicios del 2021, la morenista Claudia Rivera es el caso más notable de lo que los errores pueden costar en una elección. Nadie mejor que la exalcaldesa de la Angelópolis para ilustrar que “las campañas no se ganan, se pierde”.

En la última semana hemos sido testigos de lo que para muchos –yo incluido– considero que puede ser el gran error de la campaña de Mario Riestra, quien busca que Acción Nacional retenga la alcaldía de la capital y que esta no regrese otra vez a manos de Morena.

El supuesto atentado que sufrió en la junta auxiliar de San Francisco Totimehuacán por parte de Alejandro N., quien le habría advertido que “su cabeza vale 15 mil pesos” se convirtió en un bumerán que terminó por golpearlo y afectar su campaña que hasta se mantenía intacta.

Riestra Piña, al calor de la contienda, también se nubló y extravió el juicio al subir, de forma innecesaria, al ring electoral al gobernador Sergio Salomón Céspedes como responsable de orquestar una elección de estado en Puebla.

Dos crasos errores en una misma semana.

Y es que, si alguien ha respetado y ha cumplido a cabalidad su palabra de no intervenir en los actuales comicios ese es Céspedes Peregrina.

El mandatario poblano, a casi un mes de iniciar las elecciones en el estado, ha logrado pasar inadvertido en las campañas sin la necesidad de inmiscuirse u operar a favor de los candidatos de Morena y mucho menos a favor de Pepe Chedraui.

Sergio Salomón lejos está del estilo de Rafael Moreno o Tony Gali, a quienes el candidato panista conoce muy bien, que sí orquestaron elecciones de estado en el 2016 y el 2018 para aferrarse al poder a través de mapacherías, fraudes y todo tipo de irregularidades en los comicios que se celebraron mientras Acción Nacional ostentaba el poder en Puebla.

Sí, lo errores en campaña se pagan bastante caro y Mario Riestra cometió dos muy grandes en menos de siete días.

Riestra está dando verdaderos palos de ciego.

A ver si la historia del 2007 no se repite este 2 de junio.

Al tiempo.

Inicia de la Feria de Puebla 2024

La inauguración de la edición 2024 de la Feria de Puebla tendrá cierta carga de nostalgia, pues no solo marca la última celebración en la que el gobernador Sergio Salomón estará al frente, también es el final de un sexenio en la que esta fiesta del pueblo vivió años complicados.

Hay que recordar que en la edición del 2019 pasó desapercibida por el conflicto político que se vivió ese año con la muerte de Martha Erika Alonso, el interinato de Don Guillermo Pacheco y la elección extraordinaria en marcha.

Para el 2020 y 2021, la feria de Puebla no se celebró por la epidemia mundial de Covid-19.

Hasta el 2022, Miguel Barbosa pudo celebrar su primera feria, la cual fue de las mejores hasta hoy.

Las ediciones del 2023 y la de este año han cumplido con las expectativas y también han dejado la vara bastante alta para las futuras administraciones.

Hoy da inicio la Feria de Puebla y a los poblanos no nos queda más que disfrutarla.

Gerardo Ruiz

@GerardoRuizInc