Queda fuera la violencia de las marchas por #8M en Puebla

Queda fuera la violencia de las marchas por #8M en Puebla
Jesús Olmos
Día Internacional de la Mujer

Repudiaron Colectivas la violencia de género, los feminicidios en la entidad y exigiendo aborto seguro

Las movilizaciones feministas por el Día Internacional de la Mujer, rompieron con los estereotipos de violencia vividos durante el 2021.

Desde temprana hora, contingentes se abrieron paso de la Fiscalía a Casa Aguayo, del Gallito al Zócalo y finalmente se congregaron en el Congreso, concientizando con coloridos contingentes sobre la violencia de género, pidiendo justicia por los feminicidios en la entidad y exigiendo aborto seguro.  

Mujeres embarazadas, con mascotas, universitarias, niñas, jóvenes, adultas, y en medio algunas más radicales que rompieron vidrios e hicieron pintas, marcharon unidas sin que hubiera brotes de violencia.

Las manifestaciones dieron inicio a las 15:00 horas con el contingente universitario que fue el primero que salió de la Fiscalía, donde previamente se había manifestado el colectivo Voz de los Desaparecidos y Mujeres en Defensa del Agua.

El segundo grupo, fue el del colectivo Mujeres Unidas de Puebla, partió minutos después hacia el Zócalo de Puebla. Al grito de “las bardas se limpian, las muertas no regresan”.

En la Plaza de Armas se observó que estaban pintadas las letras turísticas colocadas frente al Palacio Municipal, en las que se podía leer “México feminicida”, “justicia” y “violadores”.

A las 16:00 horas, el Frente Feminista Radical y Bloque Negro marcharon también con dirección al Zócalo y el Congreso del Estado, resguardadas por policías estatales. Rompieron vidrios en terminales de RUTA y realizaron pintas en monumentos sin que hubiera detenidas.

Otras colectivas como Coatlicue Siempre Viva, REDefine, Somos Fuego, El Taller A.C., Colectivo Bloque Rojo, entre otras, se reunieron en El Gallito, en el Paseo Bravo para marchar por la avenida Reforma al Zócalo de la ciudad.

“Aborto sí, aborto no, eso lo decido yo”, fue el mensaje que enviaron a un grupo de católicos que resguardaban la iglesia de San Marcos en Reforma.

Finalmente se congregaron afuera del Legislativo y llamaron “cobardes” a quienes ordenaron el despliegue de granaderas para resguardar edificios gubernamentales en la capital.

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