Los inversionistas chinos están replanteándose su futuro ante el contexto global
El efecto Donald Trump y la guerra comercial que encabeza el Gobierno de los Estados Unidos, frenó el plan de BYD, el principal fabricante de vehículos eléctricos de China, de construir una planta en México.
Ante las tensiones con la administración estadunidense, los inversionistas chinos están replanteándose su futuro ante el contexto actual.
En una entrevista con Bloomberg, la vicepresidenta ejecutivo de BYD, Stella Li, indicó que “los problemas geopolíticos tienen un gran impacto en la industria automotriz”.
Aunque se especuló que BYD habría explorado tres lugares en México para la nueva planta, la presidenta Claudia Sheinbaum aclaró recientemente que aún no presentaba una oferta formal para invertir en el país.
En la conferencia matutina del 19 de marzo, la mandataria señaló tras ser cuestionada por el tema, que este grupo “tienen una inversión propuesta, pero nunca fue algo formal”.
Actualmente la compañía china está abriendo su primera fábrica fuera de Asia en el estado brasileño de Bahía, desde donde su representante Stella Li afirmó que buscarán esperar para invertir en cuanto haya más claridad para tomar una decisión.
HAce unas semanas, General Motors anunció el mes pasado que invertiría 4 mil millones de dólares en un plan para trasladar la producción de varios modelos de camionetas y SUV de fábricas en México a Estados Unidos.
